Una vida, varios usos, ¡toallas mejor aprovechadas!

Con frecuencia, una toalla de papel no es utilizada en todo su potencial y este se desperdicia. Ponemos una para cada integrante de la mesa familiar y las de los niños quedan sin usar, o apenas marcadas. ¿Por qué no utilizar estas mismas toallas entonces para hacer un primer repaso de la mesa al terminar de comer? ¿O de los platos antes de enjuagarlos? Sumamente versátiles, las toallas de papel sirven para una variedad de funciones como limpiar, absorber, reunir, lustrar, contener y conservar, entre otras. ¿Cuántas veces utilizamos un pedacito de una toalla para hacer una anotación de emergencia, y está perfecto, pero no tenemos en cuenta que podemos utilizar el resto de esta para secar la vajilla, o absorber el aceite de una fritura, en lugar de descartarla, ¡porque su potencial aún está intacto! Si sientes que esto te está sucediendo y piensas en remediarlo, solo necesitas hacer un pequeño cambio de hábitos y evaluar en cada ocasión ¿esta toalla aun me sirve? Así, cuando utilices una de estas para sacarle brillo al espejo, sabrás que puedes usarla también después para secar la pileta del baño, o para limpiar una mancha que descubriste en el suelo. ¡No siempre una toalla que ya utilizaste servirá aun para otra función! Como sucede, por ejemplo, si absorbiste el aceite de una fritura. Pero muchas veces esto sí ocurre, considéralo y tendrás ¡toallas mejor aprovechadas!